Capitulo 3

El concierto de verdad que me dejo atonita, la agilidad que tenia Michael al bailar era totalmente impresionante, su voz en cada compas de cada cancion sonaba cada vez mas energica como si era lo ultimo que hiciera para sobrevivir, igualmente sus musicos, sin dudarlo eran los mejores, minutos antes de que terminara el concierto divise a tres sombras en el techo, no se si eran hombres o mujeres pero se que eran de mi especie, logre divisar sus ojos negros, y uno que otro pensamiento maligno, temi por un momento que llegaran a oler a Michael, el era demasiado atractivo y me refiero a su aroma.

Igualmente como hise para escaparme para ir al hospital lo hise para llegar hasta la cornisa del stadium, eran dos mujeres y un hombre, obviamente de un clan que no era conocido para mi, una de las mujeres era rubia y fue la que me diviso su mirada era completamente asecina, sabia que no vendiran a ver el concierto, su proposito era otro.

- Quien eres?.- Me pregunto la rubia, era mas o menos alta, vestida de pantalon y camisa negra muy elegante

- Que vienen hacer aqui?.- Pregunte, deje en blanco mis pensamientos y por un momento me olvide del olor de Michael.

- Vinimos por un bocadillo.. unos cuantos bocadillos.- Dijo señalando al publico.

- Lo siento aqui no pueden cenar.- Conteste

- Que es ese aroma?.- Pregunto la otra mujer, oliendo el aire como si fuera un perro, hasta que abrio los ojos y vio a Michael dando saltos de lado a lado en el escenario.

- Creo que es el tipo que esta alla, el que canta.- Menciono el hombre.

- No!.- Grite

- Que te estas guardando ese bocadillo para ti solita?.- Dijo el hombre acercandose a mi, su asquerosa respiracion recorrio mi cuello, el hiso ademanes de tocarme pero le empuje hacia el otro lado del techo con mi mano.

- Alejense de aqui.- Les amenaze en un gruñido

- Y tu quien eres para decirnos que hacer?.- Me pregunto la otra mujer, una peliroja de mirada tan acribillante como la de la chica rubia

- Puedo ser su peor pesadilla, asi que larguense de aqui.- Por los tacones y el vestido no puede colocarme en una posicion de ataque asi que me limite a quedarme quieta y leer cada uno de sus pensamientos.

- Esta bien, nos iremos pero cuida muy bien a tu cantante ok?.- Dijo el hombre aproximandose otra vez hacia mi.

- Eso me suena a amenza, a el le llega a pasar algo y juro que los mato a cada uno!.- Les grite, no se porque de pronto aparecio en mi una necesidad de proteger a Michael, lo veia tan fragil y de sentimientos tan puros que me daba miedo que algo malo le pasara.

- Buena suerte.- Me dijo la peliroja, ellos bajaron del techo de un salto, yo hise lo mismo hasta percatarme de que se habian ido. Baje y de la misma manera que hise con el baño sali nuevamente a donde estaba viendo el concierto, esta vez si me perdi de un poco mas, llegue justo para la despedida.

Despues que termino el concierto Michael se fue a cambiar de ropa y yo me quede esperandole con sus musicos y el resto del equipo, todos eran mi amigables y bueno sus aromas era dulces pero no tanto como el de Michael, que me trato de sorprenderme haciendome cosquillas pero antes de que lo hiciera me di media vuelta y el quedo con.. una cara de niño que jamas olvidare.

- Ni se te ocurra.- Le amenaze, pero saben sonriendo ademas era solo una broma

- Como me escuchaste? Me vine lo mas sigilozamente posible!.- Se reprocho asi mismo

- Jaja supongamos que tengo un sexto sentido.- Le bromee

- Jaja bueno ya tendre otra oportunidad de sorprenderte, ahora que te parece si vamos a cenar?.- Me pregunto, la idea de cenar no me parecia muy convincente, pero ya me las arreglaria

- Me parece una exelente idea.- Conteste en un tono un tanto mentiroso

El resto del equipo se fue en un bus directo al hotel a descansar, Michael y yo nos fuimos en una limo negra, aun habia fans afuera del stadium gritando su nombre, con afiches, flores, peluches.. todo tipo de cosas, Michael abrio la ventana de su lado y saludo algunas y recibio uno que otro regalo. Me quede impresionada por su delicadeza con los que le amaban osea con sus fans.

- Creo que son demasiados peluches para mi solo.- Comento, en realidad eran como minimo 15 peluches, todos era ositos con un corazon en el medio que decia "I Love You"

- Llevale uno a tu esposa y los demas los donas a la caridad

- Buena idea, pero me quedare con todos, exepto con este.- Señalo a un osito blanco igual que los otros con el mismo corazon el medio y el mismo mensaje

- Porque tan feo es?.- Conteste.

- No vale, este te lo regalo a ti.- Lo tomo y lo acerco a mis brazos, fue un gesto lindo y dulce ademas el pequeño peluche estaba inundado de su aroma.

- Gracias.- Me limite a contestar, nos miramos por un momento y percibi uno de sus pensamiesntos que decia "Que hermosa es su mirada", baje la mirada un poco avergonzada.

- Bien a donde te gustaria ir a comer?.- Me pregunto, la verdad que me dio gracia estube a punto de contestarle que a un hospital pero no entenderia el chiste.

- A donde sea.

- Ok, ya tengo el cito perfecto.

El resto del camino hablamos acerca del concierto, bueno en realidad hablo el yo lo que hacia era asentir con la cabeza en todo momento, depues de cierto tiempo llegamos a un lugar llamado Dfwhefiw 1524, lo siento es que no se hablar aleman y eso fue lo que entendi, era un local de comida italiana, solo a Michael se le ocurria comer comida italiana en Alemania.

- Explicame que hacemos en un restaurant Italiano en Alemania?.- Pregunte, saben con mi pisca de sarcasmo

- Jaja no tengo la menor idea, esto fue lo primero que se me ocurrio.- Contesto sonriente, me abrio la puerta del local como todo un caballero. Una chica nos pregunto "Mesa para cuantos?"

- Para dos y por favor queremos un poco de privacidad.- Contesto el enfatizando la palabra PRIVACIDAD.

- Desde luego Sr Jackson, por aqui por favor..- La chica nos condujo a una mesa mas o menos retirada, los comensales se quedaban un poco atonitos, es que todos los dias no ves a Michael Jackson en un restaurant.

- Me siento intimidada con todas esas personas mirandonos.- Comente

- Jaja no te preocupes, solo no les prestes atencion ya yo estoy adaptado.- Contesto haciendo gestos de grandeza. Entre tantas miradas que se posaban entre nosotros percivi un pensamiento que no me gusto para nada, subi el rostro para saber de quien se traraba y vi esos ojos rojos sedientos y tan drogados como yo por el aroma de Michael, era la mujer rubia y su clan.

- Michael te puedo decir algo sin que te enojes?.- Le pregunte un poco nerviosa

- Si dime que pasa?

- Que te parece si comemos en mi casa, en realidad odio la comida.. La comida italiana.- Dije en un susurro el me miro un tanto sorprendido y se carcajeo

- Esta bien, entonces cenemos en tu casa.- Se levanto y me ayudo a mi, en serio me sorprendia su caballerosidad.

Salimos del restaurant rapidamente, Michael invento una excusa al gerente y nos fuimos sin problema, esa noche la casa estaba vacia, osea para nosotros dos, en la casa habia algunos libros de cocina asi que con eso me podia defender aunque el arte culinario nunca fue mi fuerte ni cuando era humana. Le di la direccion al chofer y este llego sin ningun percanse.

- Wow! linda casa!.- Dijo Michael bajandose de la limo

- En realidad es una casa de veraneo.- Le corregi abriendo la puerta.

- Si esta es tu casa de veraneo como sera tu casa normal?.- Bromeo

- Jaja es solo una casa, por lo menos se que no tiene un parque de diversiones y un teatro en el jardin

- Entonces es una casa aburrida..- Se defendio

- Jaja normal, oye te dire algo pero no te enojes

- A ver y ahora que pasa?.- Me contesto fastidiado.

- No tengo hambre jaja, pero si quieres podemos preparar algo para ti

- Oh eso.. No tranquila en realidad como para sobrevivir y no porque me de hambre.- Contesto, cualquier parecido con mi realidad era pura coincidencia

- Mmm, bueno en ese caso que te gustaria hacer?.- Le pregunte

- Hagamos palomitas de maiz y vemos peliculas te parece? Tienes peliculas verdad?

- Si obvio que tengo! Estan todas alla.- Señale un estante en donde estaba el televisor, gracias a Peter que era un amante del cine y compraba muchas peliculas.

- Oh! bien ire a elegir la pelicula

- Y yo ire hacer las palomitas, quieres alguna gaseosa en especifico?

- No, jugo de naranja.- Contesto sonriente.

Obviamente no sabia hacer palomitas de maiz, asi que opte por salir por la puerta de atras de la casa y con mis habilidades ya saben la velocidad de rayo corri hasta un cine, llene un bold de palomitas de maiz y ellos ni cuenta se dieron, en realida no piensen que robe, solo lo tome prestado por un momento, de igual manera fui al supermecado y tome prestado un jugo de naranja, cinco minutos despues ya estaba en casa de nuevo, deposite las palomitas en un bold de vidrio y servi dos vasos de jugo. Sali de la cocina y me encontre a Michael deliberando con dos peliculas en sus manos.

- Creo que si vemos ambas peliculas no estaria mal.- Comente detras de el, este pego un brinco que casi no termina en el techo del susto que le di.

- Ufff! No vuelvas hacer eso!

- Jajaja, ten toma esto mientras me cambio de ropa

- Pero si asi te ves hermosa!.- Dijo, en serio si eso me lo hubieran dicho en otro siglo sin dudarlo estaria roja.

- Hermosa y todo pero me ire a cambiar, no comienzes sin mi.- Subi rapido hasta mi habitacion, busque entre mi armario un sueter y un jean lo mas como posible, tome dos mantas y conte por lo menos 4 minutos para no ser tan obvia y no levantar sospechas. Saben el aroma de Michael estaba inundando cada rincon de la casa, de verdad que era embriagante y obviamente cuando el se fuera tendria que limpiar toda la casa asi mis hermanos no se darian cuenta. Antes de bajar tome dos mantas obviamente una era para el y la otra para mi.

- Bu!.- Le dije al oido, Michael volvio a brincar del susto, esta vez su aroma si me embriago por completo cerre mis ojos y me controle un poco.

- Vuelves hacer eso y te juro que..

- Juras que?.- Le dije en tono amenazador.

- Juro que tendras que cantar conmigo en mi proximo concierto.- Contesto cruzandoze de brazos.

- Jaja si claro! ese dia veras puequitos voladores.

- Jaja bueno bueno que te parece si vemos la pelicula?.- Yo conteste asintiendo, le entregue una de las mantas en la cual se envolvio.

No se como pero Michael termino recostado en mi regazo, era completamente imposible concentrarse en la pelicula con semejante aroma tan cerca de mi nariz, en realidad la pelicula me la sabia de memoria. Tampoco recuerdo en que momento Michael se acurruco en mis regazo quedandose profundamente dormido. Se veia totalmente relajado y hasta soñador, en serio no me permitiria que unos acesinos le hicieran daño, ahora mi mision era cuidarle a toda costa y obviamente que el no se enterara que yo era.. ya saben una vampira, esto traeria consecuencias para ambos. Mientras el dormia yo solo le observaba, su corazon palpitaba pausado y relajado, su respiracion era como suspiros ahogados senti cierta envidia, en tantos años tambien deseaba pegar un ojo. Los primeros rayos de sol iluminaron la casa y con ellos tambien llegaron mis hermanos, que se quedaron boquiabiertos al ver a Michael Jackson durmiendo en mis piernas mas que todo Lucia, de pronto sabia que tenia problemas..